Reestablecer contraseña

La dirección de correo electrónico está asociada a tu cuenta.

¿Por qué registarse?

Full Confession Control

Actualizar / eliminar o editar tus confesiones.

Notificaciones

Suscríbase para recibir notificaciones por email con las respuestas a tus confesiones.

Publicidad

¿Quieres publicitarte con nosotros? Comienza creando una cuenta.

¿Tienes alguna confesión laboral?

El nombre es opcional o puedes poner un seudónimo si lo deseas.

He decidido enviar mi confesión/maldá que pasó hace casi un año atrás:
Trabajaba en una empresa relativamente conocida en la alimentación, en el depto de contabilidad, ahí tenía un compañero, le pondremos 'Jabba' (Sí, como el de Star Wars) para que se hagan una idea. Era gordito, pesado el desgraciado, sapo, cahuinero, hediondo a todo (hasta una alcantarilla tenía mejor olor que él), mentiroso y sobretodo hueón. Me caía como patá en la guata, un día el maricón me acusó porque no tenía un informe con mi jefe, mi jefe me penqueó, me pique y ahí planifique mi plan malévolo muajajajajaajajajaja (imaginen risa malvada de películas).
Hice un correo falso en Gmail, de un subgerente de finanzas de una automotora (El Jabba era hueón por los autos) y de ese correo, le envíe un mail a su correo de la empresa ofreciéndole una excelente oferta de trabajo, con doble sueldo, misma pega, y hasta con auto para su movilización si sabía manejar, así tal cual como dice el proverbio chilensis; en el correo le expliqué que un amigo de él me había enviado sus referencias (Jamás mencioné qué amigo y él tampoco preguntó). Jabba estaba más contento que hipster con vale otro en Starbucks, respondió el correo de inmediato adjuntando currículum y bien chanta salió el Jabba, el hueón puso toda la pega que hacía yo con otro compañero, cuando todos sabíamos que con cuea' hacia unos registros una vez al mes y lo tenían para los mandados porque huea que hacía, estaba mal. Me pique más, y decidí citarlo a entrevista, elegí la automotora más lejana a nuestro trabajo y para allá lo mandé, pero no cualquier día, no señores, al hueón lo mandé un día que jugaba Chile, a la misma hora que daban el partido.
Previo a su entrevista, Jabba me contó en la hora de almuerzo de manera piola la peguita que le había salido, lo motivé, le sugerí que fuera y hasta que se bañara (jijijijijiji).
Jabba se retiró temprano el día de la entrevista, para llegar a buena hora, se vistió formal (Los viernes en muchas oficinas se va informal, él, andaba como único hueón con terno) y hasta al parecer se había bañado o se aplicó su buena dosis de axé chocolate en la ropa para oler decente. Mi angelito bueno me decía que le enviara un correo diciéndole que era broma y dejará mi maldá hasta ahí, PERO NOOOOOO!!!, me acordé de su CV, de la vez que me acusó y cual Gokú elevé mi Ki y se levantaron los lápices de mi escritorio, el teclado, el mouse, okeyno, eso no pasó, me entró el angel malo y ni me arrugue para decirle que le fuera bien con cara de niña buena que soy O:) ...Llegó el Lunes y Jabba entró con cara de perro '¿Dónde quedó la cara de Zorrón?' pensaba mientras me reía para mis adentros, ahí llegó la hora de colación nuevamente y le pregunté:
-¿Cómo te fue en la entrevista?-
-Nah, no me gustó la pega, era algo temporal-
-Pero las lucas eran buenas poh-
-Si pero bueno, ya lo rechacé-
Ahí después le pregunté por su trayecto a la entrevista debido a que ese día jugaba Chilito:
-Oye y te costó mucho llegar?-
-Sí, habían tacos por todos lados, era más lejos el trabajo, por eso también lo rechacé-
-Yaaaaaaaaaaaaaaaaa- (Le dije yo, léase como la voz del Jorge Alís)
Y esa es mi historia, el Jabba fue a una entrevista con alguien que no existía, se perdió el partido de Chile y más encima me imagino la cara de vergüenza y lo hueón que debió sentirse al llegar al lugar.
Eso te pasa por ser mala leche guatón, hedidondo y feo. Y si lees esto, espero que hayas aprendido la lección, no seas tan chamullero, tan chanta y tan hediondo, báñate.

Atte. Tu única compañerita de Conta que tenías en la oficina jijijijijijiji :)



No te reprimas. Completamente anónimo.

Suscríbete a nuestra lista de correo.

Ingresa tu email y te mandaremos las últimas confesiones
Nosotros valoramos tu privacidad, nunca compartiremos tu correo con nadie.