Mucho mucho mucho...

Terminaba mi carrera, ya en mi práctica profesional. Al final supe que no podía quedar trabajando ahí, siendo que di mi máximo esfuerzo y tuve un reconocimiento destacado en el estudio que realice. Justo concordó que estaba en el ocaso de una relación amorosa. Me vine abajo como nunca lo espere... Quedé sin estudio, sin trabajo, sin práctica y sin pareja... En ese entonces ya fumaba marihuana pero solo ocasionalmente. Se dieron los tiempos de soledad y fumaba más, cada día lloraba y me hundía más en mi depresión, yo no sabía que tenía depresión hasta hace muy poco (esto paso hace más o menos 5 años). Según yo solo estaba triste por todo lo acontecido... No sabía que hacer, día tras día enviando CVs a empresas que ni siquiera lo revisaban... Aguantando las quejas de la familia de que cómo era posible que no encontrara trabajo si la mayoría de los hijos de sus amigos ya tenían algo fijo e indefinido... Pasaban los años y tenia trabajos de meses y quedaba cesante de nuevo, nada de mi profesión. Trabaje hasta de noche un tiempo dadas las necesidades... Dentro de toda la tormenta en la que vivía me di el tiempo de conocer a una chiquilla, una niña que estaba estudiando pero que tenia pareja, según ella, se llevaban muy mal y no conocía lo que era el verdadero amor...

Pucha... Habian pasado años sin el contacto de una mujer, sin embargo para mí ella era única, hermosa, era tan inteligente y sentía que nos entendiamos todo lo que hablábamos... Era genial, me sentía flotando, podía ser yo, podía dedicarle canciones, podía escribirle poemas, hablar de mis gustos y para ella no parecía molestarle, muy por el contrario, aparte a mi siempre me han gustado las niñas morenitas, entonces estaba loco por ella, más encima ya la conocía de otro lugar entonces no fue tan difícil acercarme a ella, dado mis tiempos y los de ella solo podíamos hablar por redes y pocas veces nos vimos en persona... Hasta que un día almorzamos juntos y tuvimos oportunidad de hacer de todo y no lo hice... En mi cabeza pesaba la idea que ella estaba pololeando aún...

Entonces preferí aguantarme las ganas, total me dije, estoy siendo correcto. Nunca en la vida me había arrepentido tanto, después de eso, nos vimos una última vez en dónde le conté que me gustaba demasiado... Y ahí entra la historia de la marihuana... No me había dado cuenta que me había convertido en una persona dependiente, para todos lados y juntas iba con mi caño... Hasta con ella... Cuando me rechazó ahí mismo (cabe destacar que siempre pensé que éramos el uno para el otro), sentí que todas mis penas me tocaron el corazón al instante, todas las guardadas y las que nunca pensé que recordaría... Mis traumas de niñez, mis dolores pasados y presentes... Mis miedos futuros y lo que me frenaba en el presente... Sentí que había caído aún más abajo... Paso ni una semana y me llaman de una empresa para que trabaje con ellos como supervisor. La paga era muy buena, me quedaba literalmente a 8 minutos de mi casa... Era perfecta. Sin embargo la única jefa que tenía era un demonio, de esos que aunque lo hagas bien aún bajo su mirada estarás mal... Ella terminó de hundirme y pasé toda la pandemia fumando demasiado y llorando por las cosas que pasé... Recordando al amor que no pudo ser y que siempre vivirá en mis recuerdos, mis trabajos profesionales y amistades varias...

Hoy tengo mi corazón roto... He fumado cantidades bestiales de mota, ya no me interesa mi ingesta de alimentos, si un día como bien y sino, también... Siento que me perdí de mi camino... Ya no sé quién soy ni para donde voy... Mis sueños se ven nublados y casi ya no me interesan... he cuestionado demasiado los que eran mis amigos en el pasado y darse cuenta de que no muchos salvan, es doloroso... Aún cuando llevo muchos meses de terapia... Siento que nada tiene sentido.

Para los marihuanos dependientes:

Tranquilos, fumen todo lo que tengan que fumar, algún día entenderán que si era necesario vivir lo que viven. Aunque no encuentren respuestas hoy...