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El depravado

Hola a todos, quería contarles mi historia, tenía 20 años cuando comenzé a trabajar en una oficina ubicada en el centro, específicamente en esos edificios bien antiguos que están en frente de plaza de armas, el rubro de la empresa era venta de productos, en esa oficina tenían una mini sala de ventas por lo tanto el jefe recibía gente que iba a comprar sus productos. Se Supone que mi cargo era se secretaria de gerencia ( cosa que jamás fue, xke terminé haciendo pega de bodegera). Bueno el tema es que este viejo era tan tóxico, yo llegaba en las mañanas a la oficina y weon era un olor a cigarro, el viejo fácil se fumaba 2 cajetillas de cigarros en el día, dentro de la oficina, pueden creerlo, cuando me entrevistó me preguntó si me molestaba el humo del cigarro, le dije que no xke yo igual fumo pero poco, la cosa es que jamás imaginé que su pregunta iba dirigida a eso, bueno la cosa es que era verano, 30 grados de calor y una nube tóxica dentro de esa oficina, llegaba a mi casa fétida a cigarro.

Esa era una de las cosas penkas que tenía este viejo, lo peor de todo, es que con el paso de los días empecé a cachar conductas extrañas hacia mi, habían momentos que nos quedábamos solos en la oficina ya que los vendedores salían a ofrecer los productos a terreno, y eso era lo más terrible, derrepente se acercaba a pasarme un documento y me agarraba las manos, o me decía weas como que me veía guapa con pantalones, derrepente me tocaba el pelo, weon me empezó a acosar, esperaba a que salieran todos y empezaba con su actitud ql depravada, siempre me mantuve al margen haciéndole el quite, y pucha igual una es tan pava cuando es más Joven, nunca le pare los carros, solo intentaba que no se acercara a mi, y pensaba todos los días en que quería renunciar, el tema es que necesitaba las lucas, pagaba mis estudios y además ayudaba a mi mamá, entonces no era opción.

Un día llegué a la oficina y me dice que arregle mis cosas que tenía un viaje preparado al sur y que tenía que ir con el xke quería que concociera a los proveedores, quede para adentro, lo único que atiné a decirle en ese momento era que no podía xke tenía a mi mamá enferma, estuvo todo ese día presionandome para que me las arreglara y lo acompañara, obviamente yo todo el rato le dije que no y que se me hacía imposible, al final logré que dejara de insistir. Al final con el tiempo ya era una tortura tener que ir a trabajar, ya no dormía bien, me psicoseaba todo el día con que en algún momento me iba a hacer algo, o se me iba a abalanzar encima cuando estuviéramos solos, me estaba pasando la cuenta estar aguantando y quedarme callada, jamás le conté esto a nadie, ni a mí pololo, ni a mi mamá.

Dure 3 meses aproximadamente, no di más, un día decidí renunciar y de verdad que fue un alivio...

Ahora que ya estoy mucho más vieja pienso y no entiendo cómo pude haber aguantado, me llega a dar rabia no haber echo nada, derrepente donde uno es piola, tranquila, abusan...



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