Angel y demonio

Hace un tiempo, un compañero de trabajo acosó a una compañera, la cual llevaba muy poco tiempo en el lugar. Ella no confiaba en nadie, menos tratándose de él, que tiene muy buena llegada con los jefes (don de la palabra, charlatán, Uds saben...); Me contó y la verdad, no dudé, fui y le 'paré el carro' en 2 segundos. Ahí quedó el cachero de las pampas, cabeza agacha, sin decir ni pío.

Nunca más me dijo ni hola, y la verdad: a mi, maní. El punto es que un día en una reunión otro colega me dijo que susodicho me estaba colocando mal con todos, que no tenía idea de nada laboral, que exageraba con mis dichos, (siento que era una descripción de él mismo) etc. Le preguntaron si le había hecho algo y él se quedaba callado. Así seguimos trabajando un tiempo, llegando al punto de verlo y que los chakras se me descalibren a más no poder. Cada vez que tenía que interceder con mi departamento, omitía y yo me enteraba por terceros, cuartos, quintos, o gente tan ajena como el Sr. Que vende sopaipillas en la esquina. Le dejé claro el conducto regular, pero ahí, como el jefe lo tiene de hijo pródigo, hizo oídos sordos... Ahí me enteré que acosó a otras niñas, y que todo quedó en silencio absoluto. Me dio rabia y más bronca le agarré.

Hace unos meses comencé a ver un trabajo que estaba ahí, detenido, y tuve que llamar a personal que tenía que ser supervisado por él, pucha, cero avance, lo que debería estar hecho, nada, él se puso la coraza diciendo que que la gente me tiene mala porque 'les encuentro todo mal'... Pero es tan tonto, que si yo de verdad encontrase todo mal, no estaría evidenciando que la pega de él no fue hecha, ???? Pero bueno...

Me dan ganas de desahogarme como súper sayayin, pero tengo moral, ética y cariño por mi mismo.

Encontré sus redes abiertas en un pc, y mi diablito me decía velo, hazlo, pero mi angelito me dice que no, para qué, todo cae por su peso. Pero ya me tiene chato, mal, no deja de hablar de mi, y de hacerse el gil. Más encima acosador y fome, porque nadie hizo ni hará nada. Me gusta mi pega y no me gustaría irme por culpa de un arribista.