Cariño extra

Vengo a exponer mi confesión en este medio virtual, que por suerte, es anónimo.

Tengo 35 años, profesional exitosa, familia, un par de hijas, todo bien próspero y tranquilo. Un marido que es un 7, trabajador, buen padre y todas esas virtudes que poco se ven en los hombres hoy en día.

Siempre le he sido infiel. Confieso que desde que pololiabamos he estado en paralelo con otras personas. A algunos les he dicho que soy casada y a otros no, juego el rol de mujer separada y bla bla bla, unos me creen otros no, pero ninguno se ha negado a tener una aventura conmigo, sea esporádica o sean por meses.

La verdad amo a mi marido, pero tengo esa necesidad de buscar siempre en otros lados... No tan solo intimidad física, a veces es atención, cariño y cosas que en realidad tengo en casa. No les vendere el cuento de que me hace falta algo, porque en realidad en casa me dan de todo, pero como les cuento cada cierto tiempo aflora en mi esa necesidad de estar con otros.

Hace un tiempo vengo saliendo con un colega es buen cabro, atento, preocupado. No estoy enamorada pero él está en el plano de hacer familia y la verdad es que le mentí diciendo que estaba separada y bla bla bla... entonces se proyecta conmigo y esas cosas... Lo sé, soy la peor.

El cabro no es muy bueno en la cama, la verdad he estado con mejores pero tengo la necesidad de compartir tiempos con él, me agrada su compañía, disfruto de su atención y sus cursilerías.

No, no me estoy enamorando pero siento que él a estar en ese plano debería estar con alguien que le haga la segunda en sus cosas. Yo no dejaría mi familia por irme con otro hombre. Me da pena mi colega.

Sé que soy la peor mujer del mundo, una zorra, maraca y todos esos sinónimos habidos y por haber.

En mi defensa, solo puedo decir que hago lo mismo que muchos hombres, tener aventuras fuera del matrimonio pero dentro de él soy la mujer y mamá perfecta.

Quizás algún día me quede la caga, no sé... pero me prometí que cuando tuviera otra aventura iría con la verdad por delante, diciéndoles lo que tengo y lo que soy. Así evito hacer sufrir a quienes no tienen la culpa de haberse topado a alguien como yo.