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Joven y astuta

Tengo 21 años y desde que salí del colegio he estudiado psicología, carrera que decidí congelar por temas de estrés. Resulta que este año me puse a buscar pegas, cosas sencillas en las que pudiera ganar un par de lucas sin perder la poca cordura que me quedaba. Postulé a una de 'vendedora' en la que ofrecían un sueldo bastante apetitoso, me atrajeron por la plata. Me llamaron de esa pega aunque no cumplía con todos los requisitos (pedían gente sobre 24 años y, como ya dije, tengo 21) y me dirigí a la entrevista, que se llevaría a cabo en la comuna de providencia. Llegué al recinto y me encontré con el edificio más ordinario del mundo entero (¿cómo podían tener tan malas instalaciones si, según ellos, tenían tan buenos ingresos?), en fin, tuve que esperar cerca de dos horas para que me entrevistaran, ya que habían unas 7 personas antes que yo. Cuando al fin me hacen pasar, me doy cuenta que ellos realmente no buscaban un vendedor.

Me explico; era una pega 6x1 (sólo los viernes libres) en la que de lunes a miércoles tenías que ir puerta a puerta captando y buscando clientes, los cuales (cito textualmente) 'no podía ser gente fea, picante, ni pobre'. Con eso ya me curaron de espanto, no sólo iba a tener que ser captadora de lunes a miércoles (no tengo nada en contra de los captadores, pero me carga esa pega), sino que no podía terminar mi 'jornada de trabajo' hasta que tuviera 25 clientes tomados. A todo ésto, el trabajo era para ser 'vendedora' de suscripciones para las termas internacionales. El jueves mi trabajo era hacer de telefonista y contactar a medio mundo para ver si es que querían visitar el parque. Viernes libre. Sábado y domingo era visitar el parque con los clientes, todo el día.

Estaba curada de espanto con todo lo que me decían, pero la cosa no terminaba ahí. Me hicieron pasar a hablar con el gerente, un tipo que te humillaba a más no poder y te empelotaba a preguntas, claro, el trabajo era de más de 45 horas semanales, por lo que ellos no querían que tuvieras familia u otras obligaciones. Al final me hicieron hablar con alguien que me iba a explicar lo del sueldo. EL SALARIO ERA EL MÍNIMO! Pero según ella, con tus ventas eras capaz de hacerte un palo cada fin de semana, que ella lo sabía porque también era vendedora. Era cosa de verle la pinta para saber que no ganaba un millón a la semana.

¿Qué opinan de que tomen a la gente joven de weona y que la intenten atraer con falsas promesas de sueldos millonarios? Yo no acepté el trabajo, pero hubieron vario cabros que se quedaron por la plata.



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