Araña... Arañita que sube la escalera

En mi trabajo, como en todos, hay subgrupos. Debido a que somos muchos en la empresa, nos hacemos amigos entre los que trabajamos mas juntos.
Lo que es común a todos es que el jefe nos cae mal. Es negrero, falto de respeto, atropellador...en fin, ya se imaginan como es.
Resulta que queríamos darle una pequeña broma para que sufriera un rato, nos tenía muy aburridos.

Por ahi supimos que le tenía fobias a las arañas. Pero no miedo como la mayoría de la gente. Lo de él era una fobia terrible, no podía ver a ninguna araña por muy chica o inofensiva que fuera. Nos pusimos de acuerdo con el grupo de asustarlo con una.

Por designios de la vida, Dios, karma, horoscopo o lo que sea, a la semana me encontré en el patio de mi casa una araña pollito, de esas peludas y grandes. Tuvo que haber medido unos 6 u 8 centimetros. Ni tonto ni perezoso la atrapé (a mi me generan rechazo, pero no un miedo taaan grande). La puse en un frasco de capsulas de spirulina, le hice hoyitos a la tapa para que respirara y esperé pacientemente al día siguiente.
En la mañana planeamos con mis colegas cómo hacerlo. Decidimos que ellos lo sacarían de la oficina con alguna excusa y yo entraría y solo la dejaría ahi.

Pensé en dejarla en un cajón del escritorio, pero sería muy obvio asi que la dejé en un mueble con libros y archivadores y salí haciendome el loco. Ahora solo teníamos que esperar.

Los 15 minutos que transcurrieron desde ahi hasta que se dió cuenta fueron eternos para todos nosotros. Nos reíamos de la nada. Estabamos en eso cuando escuchamos un grito desesperado, agudo, casi femenino, digno de una película de terror. El pobre tipo (si, pobre, porque al verlo me dió pena) estaba parado arriba de su silla, la araña estaba entre los archivadores, como a tres metros de él. Estaba muy pálido, temblando, había dado vuelta su café sobre el escritorio y nosotros ahi parados, no sabiamos que hacer: no nos podíamos reir porque se iba a notar y tampoco queríamos sacar tan luego a la araña para extender el sufrimiento del jefe lo mas posible.

Finalmente entré yo trayendo en la mano ¡oh, sorpresa! un frasco de capsulas donde cabía super bien la araña (de a donde lo habré sacado?? jajaja) y la metí ahi. Cuento corto: el jefe nunca supo cómo la araña llegó ahi, anduvo medio pálido todo ese día, al día siguiente en la mañana no quiso entrar a su oficina y trabajó al lado mío (fuck!!!!) y bueno, eso. Se preguntarán si después de eso cambió y fue un buen jefe... pues no. Siguió y sigue siendo un pelmazo pero al menos le dimos un susto.

Esto fue como hace dos años. Pensábamos repetir la experiencia y averiguamos que le tiene miedo a los caimanes, serpientes en general pero en especial la cascabel, coral y pitón, lagartos, anacondas. Lo veo dificil porque ninguno de esos animales cabe en un frasco de remedios, asi que vamos a probar con versiones mas pequeñas como sapos, lagartijas o algo asi. En una de esas su arañita loca de nuevo no estaría demás jajaja