La magia de la Navidad
Leyendo la confesión de la magia de la navidad de la niña que había pedido un set de Play Doh, recordé una navidad que jamás olvidaré gracias al administrador de un supermercado antiguo, El Molino...
Yo tenía como 5 o 6 años, vivíamos cerca así que mi mamá iba a comprar ahí casi a diario, había una promotora en la sección de juguetes, mientras mi mamá compraba yo me quedaba con ella y me dejaba ver todo, no éramos de muchos recursos (padre alcohólico y drogadicto) así que fantasiaba mucho con todos los juguetes que habían ahí, llegó la época navideña y ella estaba vestida como viejita pascuera, un día me dijo que le escribiera una carta al viejito pascuero, le pidiera todo lo que quería del supermercado y ella se la iba a entregar, pedí muchos juguetes, unas cajitas para galletas que a mi mamá le encantaban, pan de pascua, de todo, acostumbrada a recibir muy poco más que nada dí opciones de lo que quería, hasta que llegó el 24 de Diciembre y golpearon la puerta, ¡ERA EL MISMISIMO ADMINISTRADOR DEL SUPERMERCADO! Traía 2 sacos con regalos, salí a ver y me dijo que el viejito pascuero se había equivocado y que me había dejado los regalos allá, pero que esperara hasta las 00:00 para abrirlos, era TODO lo que había escrito en la carta, los regalos que pedí para mí, mi hermano, mi mamá y mi papá ¡hasta el pan de pascua!
Hasta ahora es la navidad más emotiva que he tenido en mi vida...
Es la única Navidad que los regalos me distrajeron del show que se pega mi papá cada año y no me quedaron malos recuerdos...