Uno como muchos
Aquí uno más que a los 34 estoy aún soltero y solo. Leí cada párrafo y es como si lo hubiera escrito yo, con la diferencia de que si he tenido actividad sexual, no tan frecuente pero si, además que nunca fue nada serio o con personas con las que pudiera comprometerme más allá del acto sexual y escapando de los estándares heterosexuales.
Te entiendo tanto y sólo puedo decirte que no estás solo, aunque claramente nos sintamos así. Respecto a la pornografía y la masturbación son cosas que pasan a ser de la normalidad de un hombre soltero, porque el deseo sexual está presente igual, creo que en este momento es lo que me está quedando porque ya hace varios años que no tengo “éxito” en tener intimidad con otros, aparte que mis métodos de conquista eran bastante cuestionables y en realidad era un simple trámite para conseguir sexo pero cero afecto, sin amor.
Escucha a tu amiga cristiana, ellos aunque hoy por hoy, nadie quiera nada con todo lo que suene a religión, muchas veces tienen buen consejo, después de todo creer en Dios, te da una sabiduría que no podría tener ni el más inteligente ateo, científico o filósofo.
En lo que a mí respecta, estoy en un proceso de transformación bastante difícil, al principio nombré algo sobre sexualidad y no heterosexual, 34 años obviamente a esa edad muy pocos son vírgenes, la mayoría de los gays y lesbianas viven su vida, gozan de su sexualidad, tienen parejas, se enamoran, conviven, terminan y se vuelven a emparejar. Yo nunca pude encajar en esa “normalidad” y aunque desde la adolescencia salí del closet y toda mi familia sabe mi cuento, jamás me sentí completo siendo quien pensé que era. Es por eso, el porqué del proceso en el que estoy, no es algo que determiné vivir por mi mismo, ni que dependa de mi, al menos no en su totalidad porque requiere de un poder sobrenatural divino para lograrlo, pero es experimentar el “devolverme” de todo lo que he caminado hasta hoy respecto de ser homosexual y llegar a ser lo que debí haber sido siempre. Puede que me demore algunos años o puede que me demore toda la vida en lograrlo, no lo sé, depende de si me dispongo a ser ayudado.
Los psicólogos y el sistema del mundo apoyan y aprueban todo lo que tenga que ver con la agenda LGTBI y las organizaciones y activistas gay animan a todo el que se sienta confundido en su sexualidad y en su vida a darse la oportunidad de descubrirse, redescubrirse y aceptarse como homosexual, lesbiana, bisexual, transgénero, etc según sea el caso. Pero jamás le han dado lugar a que una persona que en algún momento se sintió identificado con esas opciones o géneros (llamelos como ud quiera), en el presente ya no se sienta igual de identificado y quiera volver a ser como antes era o como debió haber sido siempre. En ellos no existe tal cosa como meterte de nuevo al closet y si existiera, sería esconderte, ocultar lo que eres.
Claro ese es un proceso que escapa a toda ayuda humana psiquiátrica, psicológica y legal que pueda existir, porque para eso simple y llanamente necesitaríamos a Dios que pueda trabajar en la vida de las personas. Y personalmente yo tengo todas mis cartas puestas en creer que Dios hará. Hoy por hoy vivo tranquilo y en paz, no estoy desesperado por encontrar a una mujer con quien descubrir una heterosexualidad que muy poco experimenté cuando era adolescente, porque sé que falta mucho todavía que Dios trabaje en mi y ordene lo que tenga que ordenar en mi interior, pero creo firmemente en el, que el terminará lo que empezó en mi. Creo en Dios porque el no es hombre para mentir ni hijo de hombre para que se arrepienta.
A ti te digo muchacho de la confesión, había pensado escribirte esto como comentario, pero se alargó demasiado y me expuse a mi mismo como ejemplo de que no eres el único solo en esta vida. El mejor consejo que te puedo dar es aférrate a Dios, Papá es bueno, Papá es fiel, Papá nunca falla. Todo pasa por algo, quizás esa soledad y ese desorden en tu vida está presente solamente para que te acerques a Cristo. El es tu esperanza, tu salvación y tu sanidad, como lo ha sido conmigo. Y no estoy hablando de religión, no. Estoy hablando de la Vida de Dios impartida al ser humano y eso es algo muy diferente y muy pocos han querido experimentar.
P.D.: ¿Lo laboral en la confesión? Ninguna, simplemente creí justo que entre tanto consejo humano de que busque terapia, presentarle a Dios al muchacho, como su única opción de que su vida sea ordenada.