Todes.

Más que una confesión, es algo que paso en mi trabajo y no se como definirlo, si es trágico, terrible, no se.

Primero que nada, no tengo dramas con el lenguaje inclusivo, si los demás lo usan, por mi no hay problema, no lo uso, porque no tengo la costumbre y se me hace forzado, a modo personal, pero tenía colegas que lo usaban y bacan.

El problema fue, cuando comenzamos con una reunión online, estaba la jefe de finanzas, nuestro jefe, rrhh, ventas y jefe de bodega, con nosotros en la reunión, estábamos hablando y viendo las hojas que las demás áreas tenían que presentar, hasta que salió nuestra colega.

Hace un tiempo, ella había empezado con el lenguaje inclusivo, el todes elles, nosotres etc, ese tipo de cosas, los demás no teníamos problemas pero nuestra jefa si, le molestaba, se lo había dicho a la colega y ella aun así, no cambió.

En esta reunión, la jefa empezó a hablar, explicando todo y bla bla bla, hasta que la colega pide la palabra. Pensamos todos, que era para aportar en lo que la jefa decía. Y no.

Comenzó a pedir (casi exigir) que los documentos comenzarán a tener lenguaje inclusivo, que debería ser una norma dentro de la empresa, para no ofender a nadie.

Nos dio una charla de no más de 5 minutos, y todos en silencio, nadie la interrumpió ni nada, ella se sentó, y la reunión siguió.

Al otro día, la jefa le hizo una para de carro, y ella si, si, y siguió en su onda. Se agarraron con ganas cuando ella envió un informe en lenguaje inclusivo, y ahí, los gritos se escuchaban de afuera.

Pero nuestra colega no cambió.

Después de esa pelea, no duró ni dos días cuando la llamaron y la echaron.

Después de eso, se envió un correo masivo diciendo que la empresa apoyaba la igualdad y respetaba todo, pero que el lenguaje inclusivo era de uso personal y no para situaciones laborales.

DE esto ha pasado casi dos meses, más o menos, y nadie, nunca más, ha hablado del lenguaje inclusivo.