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No hay que dejarse

Con todo lo que le ha pasado a Ámbar, Antonia, Fernanda, la pequeña Shopie, y todas las que han partido y todas las que hemos callado me ha hecho recordar uno de los peores momentos de mi vida.

Hace dos años atrás, conocí a alguien por la casualidad de la vida de toparme justo con el sujeto en el mismo lugar, acepté conocernos (porque que hay de malo con conocer a alguien?). En un principio, el tipo era divertido, atento, mega caballero y siempre un paso adelante, por ejemplo, salir a compartir de noche, el ha tenía visto el uber para llevarme de regreso a casa y luego él partir a la suya, siempre queriendo pagar todo (yo siempre he sido independiente pero su afán de pagar y hacer todo él era sin limite), inventando panoramas, etc. Con el tiempo pasó a hacerse mucho más presente que a alguien que estas conociendo, siempre me iba a buscar al lugar del trabajo, siempre armó todo, como ir a comer, auto invitarse a un lugar al que yo debía ir, etc. Terminé envuelta con alguien que no sé en qué momento sucedió pero en realidad no era lo que yo realmente quería. Si se preguntan cómo a alguien adulto podría pasarle esto sin poder decir no antes de que te des cuenta de todo lo que pasa, bueno, no sabría responder pero así parte todo, primero crees que esta todo bien, luego empiezas a sospechar y te sientes exagerada, después culpable porque no supiste decir que no, llega el punto en que ya no puedes poner límite y la gente empieza a juzgar, por qué no dijiste nada, por qué permitiste eso, por qué no hiciste nada antes, que acaso te gusta el leseo, que te veías calladita y no reclamaste nada, que eres adulta y blabla, por eso no hablé nunca y ahora años después sigo viviendo con el nudo en la garganta y el tormento vivo.

Resulta que pasó un par de meses y el tipo ya era obsesivo, demasiado controlador y decía que era por cuidarme, yo ya no quería salir con él ni a comer una sopaipilla y decidí nunca más verlo, cuando se dio cuenta de esto, comenzó a ponerse agresivo, me cobró dinero, todo lo que gastó saliendo conmigo, desde el completo de carrito hasta el uber que alguna vez no me dejó pagar.

Era tanto su acoso que le pagué plata, pero no era suficiente, él avaluaba todo en $500.000, yo desesperada junté el dinero y se lo entregué, mientas juntaba el dinero era desesperante, llamado tras llamado, mensaje tras mensaje, verlo fuera del trabajo, esperando en cada lugar que sabía que iba a estar, le pasé la plata pensando en que terminaría todo ahí pero fue peor. No le conté a mi familia porque sentía que todo era mi culpa, que yo permití conocer a alguien y yo me lo había buscado, callé, no dije nada y cada vez era todo mas hostigoso.

En paralelo, unas 2 semanas antes de decidir alejarme de esta persona, comenzaron a llegar WhatsApp de números desconocidos, donde me trataban de puta, maraca, con preguntas como 'con quien te acostaste hoy día?' o 'quién te lo tiró adentro hoy?' o 'de cuál de todos tus amigos te tragaste el... ', todo era connotación sexual, cada número nuevo lo bloqueaba, y volvía a escribirme el supuesto psicópata, luego empezó a perseguirme, me tomaba fotos camino al trabajo, sabía que había comido, donde había comprado, hasta cuantas veces saqué plata del cajero y en cual.

Y por otra parte, el tipo escribiéndome que le pagara su dinero y dejaba de molestar, mientras el psicópata anónimo seguía insultandome y persiguiendome. Acudí a PDI para ver si su brigada de cibercrimen me ayudaría pero me dijeron que debía haber algún daño en concreto y que me quedara tranquila, que era alguien ocioso y que algún día se aburriría, si, eso me dijeron, que no exagerara. No me creyeron.

El acoso anónimo seguía y el otro tipo desapareció a los días de entregarle su plata. Un día X el psicópata anónimo me escribe que me iba a quitar la vida, que yo no podía estar con nadie si no era con él, acudí a hacer la denuncia a Carabineros y mi familia solo sabia del psicópata anónimo, me iban a dejar y a buscar y mi vida dejó de ser libre, caminaba con miedo, en el trabajo me cuidaban y me acompañaban a todas partes al igual que mis amigos y familia.

Al tiempo una alumna en práctica de fiscalia se contacta conmigo, quien se puso en mi lugar, ella me dejó medida de protección, Carabineros iba en ocasiones para ver si necesitaba algo, si estaba bien y que cualquier cosa llamara al plan cuadrante de mi sector, así que cada vez que el psicópata anónimo me escribía o me mandaba fotos que estaba cerca de mi vivienda, llamaba a Carabineros y acudian a ver si estaba, pero el maldito siempre lograba irse. Como no tenía indicios de quien era no podía dar una descripción de persona así que cualquiera podía ser y eso no ayudaba.

Finalmente, me di cuenta que era el mismo tipo, lo entendí, junté piezas del puzle, me fui dando cuenta de las descripciones que dieron mis vecinos, de tamaño de persona, vestimenta y aunque jamás se vio cara, era evidente todo, lo que me escribía el psicópata anónimo, saber cual era mi casa o detalles mínimos que solo alguien cercano podría saber, además de que el tipo era la única persona que no hacía nada de su vida en todo el día, tenía todo el tiempo para perseguirme, era el único que tenía tiempo para inventar perfiles falsos míos y de tiendas para revisar mis redes, era el único lejano a mi círculo que sabía lo que yo hacía en mi día a día.

Pero aún más, me hace estar segura porque casualmente los mensajes de acoso también le llegaron a él en el mismo tiempo hablando mal de mi y el nunca quiso denunciar, claro, como se iba a denunciar el mismo?

Y bueno, me di cuenta que era la misma persona, por muchas cosas, nunca conté nada, al final para mi familia sigue siendo el psicópata anónimo, pero yo sé quien fue y me da pena y rabia no poder hacer nada, porque fiscalia 'archivó' mi caso, no había evidencia contundente más que mi palabra, él está contento despues de todo el daño que hizo, mi vida perdió libertad y seguridad, mi vida jamás volvió a ser igual, aun tengo pesadillas donde veo su cara persiguiendome. Jamás volví a saber de él, cambié muchas veces mi número de teléfono y me fui del lugar donde vivía, me cambié de trabajo y dejé todo esto encerrado y guardado en el pasado doloroso.

Si no hubiese sido por Carabineros, sería una más del número de femicidios del 2017. Fiscalia nunca hizo nada, la alumna en práctica se fue y quedé sin apoyo, si llegaras a leer esto y te hace sentido te agradezco en el alma tu ayuda, siempre pido que estés bien y tengas éxito y felicidad en tu vida.

Mujeres, no se callen, atrévanse a decirle a su familia, quizá si hubiese hablado hoy no seguiría sufriendo en pesadillas y angustia cuando lo recuerdo. Las personas psicópatas son así, no te das cuenta cuando ya no puedes arrancar y ellos ya tienen todo el control. No, no estamos locas, no somos exageradas, esto pasa realmente y es muy doloroso. Atrévanse a salir de eso, se puede con apoyo y con seguridad. Seamos capaces de creer en la historia de la otra que no supo en qué momento terminó pasando algo así y no supo que hacer, como podría ser el caso de Rebeca.

Finalmente no continúe con denuncia porque tenía miedo a ser expuesta desde mi intimidad, a eso le tengo terror, pero algún día pagará, todo el daño y maldad alguien día se devuelve.

Animo chicas, no estamos solas.



No te reprimas. Completamente anónimo.

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