Reestablecer contraseña

La dirección de correo electrónico está asociada a tu cuenta.

¿Por qué registarse?

Full Confession Control

Actualizar / eliminar o editar tus confesiones.

Notificaciones

Suscríbase para recibir notificaciones por email con las respuestas a tus confesiones.

Publicidad

¿Quieres publicitarte con nosotros? Comienza creando una cuenta.

¿Tienes alguna confesión laboral?

El nombre es opcional o puedes poner un seudónimo si lo deseas.

Les contaré algo que me pasó un par de años atrás...
Mientras estaba estudiando, en unas vacaciones de invierno decidí trabajar de promotora.
Me pusieron en la juguetería del Ripley del Parque Arauco.
Yo estaba de promotora de una marca para niños (Como siempre los dividían por marcas femeninas y masculinas, onda barbie, my little pet y etc a un lado, un nerf, hot wheels y etc al otro).
La cosa es que en los momentos más fomes del día, yo me iba a conversar con las niñas de mattel al lado de las cosas para niñas.
Un día se acercó un niño (debe haber tenido a lo más 5 años) mientras la mamá hablaba por celular, se acerca a unos peluches de animalitos interactivos. Toma uno de gatito y me dice 'me encantan estos animalitos' yo le respondo: 'si?? Cual te gusta mas?'
Y el me dice 'me gustan todos... Es que son tan adorables'.
En eso veo que se acerca un energúmeno, que supuse que era el papá, le gritó algo a la mamá y fue donde el niñito y le gritó super fuerte: 'CUANTAS VECES TE HE DICHO QUE NO AGARRES ESTAS MARICONADAS, ahora anda a ver las pistolas o los autos como un niño normal'.
Me acuerdo perfecto porque me marcó. Nos dejó mal con mis compañeras.
No alcanzamos a hacer nada (tampoco podíamos) y vimos como ese niño se iba a la zona masculina infantil casi llorando.



No te reprimas. Completamente anónimo.

Suscríbete a nuestra lista de correo.

Ingresa tu email y te mandaremos las últimas confesiones
Nosotros valoramos tu privacidad, nunca compartiremos tu correo con nadie.